Tecnología y perforación a distancia

Las tecnologías emergentes impactan a la industria petrolera en las nuevas perforaciones a distancia, incrementan la eficiencia y minimizan riesgos operativos en los procesos de perforación de pozos y extracción de hidrocarburos.

Incontables disciplinas se conjugan en la perforación de pozos para la extracción de hidrocarburos del subsuelo, para la posterior refinación y disfrute de los beneficios que el petróleo brinda a la humanidad. Donde se supone, tras una investigación geológica, sobre la existencia de un yacimiento petrolífero, la perforación de pozos es el modo de comprobar dicho estudio previo, tras lo cual se procede a los pasos posteriores concernientes a la extracción del oro negro.

Tras acondicionar el terreno a ser perforado exploratoriamente, en su primera etapa, se suele realizar una perforación rotatoria o trepanación con circulación de barro, a la profundidad donde se ha indicado tentativamente la ubicación del yacimiento. El equipamiento consta de un sistema mecánico o electromecánico que soporta un aparejo diferencial, compuesto por una torre de altura entre 20 y 30 metros para soportar el movimiento de tuberías y herramientas que operan por la transmisión de energía de motores eléctricos o a explosión.

La perforación remota es una avance para la explotación petrolera en zonas de difícil acceso

En casos donde la perforación es realizada sobre suelo marino, se han de instalar plataformas lejanas a las costas y sobre aguas muy profundas, sobre una profundidad hasta de 200 mts. Las plataformas pueden ser flotantes o ancladas al suelo marino, resistentes al oleaje y extremas condiciones atmosféricas.

La perforación vía remota supondrá un avance muy valioso en las técnicas de perforación, al minimizar los riesgos del personal y los equipos, minimizan los costos operativos e incrementan la eficiencia del proceso. La perforación y extracción de tanto el gas como el petróleo vía remota permitirá que los operadores puedan vigilar y controlar las operaciones de perforación con mayor eficiencia y en entornos más seguros.

La tecnología tiene un impacto positivo en la exploración y explotación de hidrocarburos

Un yacimiento en Alaska, por ejemplo, con condiciones atmosféricas muy hostiles, podrá ser operado y controlado con mayor eficiencia desde locaciones distantes.

Es así como los avances en tecnologías en computación y telecomunicaciones impactan positivamente también a la industria petrolera, haciendo posible la transmisión masiva de datos por el incremento de los anchos de banda y comunicaciones vía satélites desde los centros operativos hasta locaciones de extracción en lugares remotos del planeta.